Si en vez del siglo XXI estuviéramos viviendo en el XVIII, lo del PSOE de Cádiz en el acto de entrega de las Hijas e Hijos Predilectos y Adoptivos de Cádiz hubiese sido un caso “de libro“ del despotismo ilustrado más arraigado.
Todo para el pueblo pero sin el pueblo. Una lapidaria frase que podría atribuirse a Catalina II de Rusia, Federico II El Grande o Juan Espadas en Chiclana. Y es que Mara Rodríguez lo tuvo claro: prefirió arropar al que puede ser candidato a la presidencia de la junta por el PSOE, Juan Espadas, antes de celebrar en Cádiz uno de los actos más importantes y emotivos del año: la entrega de los premios a quienes verdaderamente y con el corazón llevan a Cádiz por bandera allá donde van.
Y es que hay momentos en los que las diferencias políticas pasan a un segundo plano. Uno de ellos es, sin duda, la ceremonia de entrega de los premios a las Hijas e Hijos Predilectos y Adoptivos de Cádiz. No en vano prácticamente toda la corporación municipal asistió al acto excepto la portavoz del PSOE quien, curiosamente, acusaba al alcalde hace apenas cuatro días de “falta de altura política”…